Como parte de la tercera jornada de reforestación del 2016, 235 empleados del Banco Popular sembraron más de 2,500 árboles de caoba hondureña, cedro, cabirma y mara en casi 90 tareas de la comunidad Los Montones Abajo, en San José de las Matas, dentro del proyecto del Plan Sierra
La entidad bancaria incluyó a 75 jóvenes becados por el programa Excelencia Popular para que se hicieran partícipe de la acción social.
Una vez alcancen su etapa madura, los árboles sembrados tendrán la capacidad de absorber anualmente unas 800 toneladas de CO2, proteger hasta 300,000 kilogramos de suelo y almacenar 7.5 millones de litros de agua, contrarrestando de este modo los gases de efecto invernadero y la desertificación.
Esta actividad se realizó en coordinación con técnicos del Plan Sierra. La reforestación permite aumentar la cobertura boscosa de la Cordillera Central, fundamental para la producción agrícola y el consumo humano, beneficiando específicamente a la cuenca hidrográfica del Ámina, la cual alimenta al río Yaque del Norte.
“Somos socios estratégicos del bienestar presente y futuro de todos los dominicanos y esta jornada es un hecho tangible de ello”, afirmó momentos antes de iniciar la siembra el señor Robinson Bou, vicepresidente del Área de Negocios Corporativos. Señaló que con estas acciones “seguimos construyendo la enorme labor social que, con mérito, ha desplegado la marca Popular desde su misma fundación… ratificando ante la sociedad nuestro compromiso como empresa socialmente responsable”.
Ejecutivos y empleados del Grupo Popular participan en jornadas de reforestación en diversos puntos del país desde 1999, habiendo contribuido con la siembra de más de 250,500 árboles.
Además de las siembras, la organización financiera aporta cada año recursos económicos al Plan Sierra, que garantizan la capacitación de la población local sobre la necesidad de explotar racionalmente los recursos naturales y hacer un uso sostenible de ellos.
Estos recursos sirven además para fomentar la investigación y el desarrollo de mejoras científicas sobre métodos de siembra y variedades arbóreas más resistentes, de crecimiento más rápido y que necesiten un menor consumo de agua. Fruto de esto es la implementación en esta jornada de una gelatina que se inserta en el hoyo donde se siembra la planta, reteniendo el agua y protegiendo el nivel de humedad, lo que aumenta la supervivencia de la especie arbórea, aunque no llueva en cierto tiempo.
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