La inclusión financiera pasó de ser una acción voluntaria a una línea estratégica que ha hecho que la Asociación Popular de Ahorros y Préstamo se adapte, desde la adecuación de sus sucursales hasta la capacitación de su personal para atender a las personas con algún tipo de discapacidad con todo su potencial.
“La barrera la ponemos nosotros” dijo Mildred Minaya en el panel experiencia compartida en Responsabilidad Social Empresarial en el sector financiero.
Este panel es se desarrolló en el marco del seminario internacional sobre Responsabilidad Social Corporativa y Empresarial que organiza el Observatorio para la Protección del Consumidor (ONPECO).
Minaya expresó que no basta con adaptar físicamente a una entidad financiera para lograr la inclusión de las personas con algún tipo de discapacidad. “Hay que poner los cajeros al nivel de estas personas para atenderles” de la manera adecuada. Asegura que el reto que tienen es adaptar sus canales digitales.
Esta visión forma parte del programa APAP TODOS, “bancarizando y estableciendo una comunicación directa con las personas sordas”.
APAP es la primera entidad financiera del sistema en ofrecer servicios financieros a personas con discapacidad a través del programa de accesibilidad bancaria e inclusión, APAP Todos.
Inversión desde 2014 Con una inversión de RD$15 millones desde 2014, el programa fomenta una cultura inclusiva a través de cuatro ejes de actuación: infraestructura, negocios inclusivos, políticas y procedimientos e inserción laboral.
Las iniciativas cumplen con el principio de accesibilidad universal y trato igualitario, establecido en la Política de Igualdad y No Discriminación de las Personas de la entidad, así como con disposiciones de la Ley 5-13 sobre discapacidad.
Sus primeros pasos para facilitar la atención en lengua de señas a personas sordas le significaron en 2015 el reconocimiento del Consejo Nacional de Discapacidad (CONADIS) como pionera en favor de la inclusión financiera.
En 2016 se habilitaron las tres primeras sucursales accesibles del sistema financiero nacional, con cajas especiales para facilitar los servicios financieros a personas con discapacidad, principalmente fisicomotora.
Para 2017 continúan las adecuaciones de infraestructura para un total de nueve sucursales en Santo Domingo y Santiago.
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